Cena recalentada – Homenaje a Golpes Bajos

Como ha comentado en alguna entrevista el propio Iván Ferreiro, el disco Cena recalentada (Warner, 2018), su particular homenaje a Golpes bajos, es un capricho que se puede permitir en estos momentos de su carrera, y como tal capricho, es muy gozoso.Y se nota, tanto en la cuidada grabación del disco (en la que se reproduce toda la discografía del grupo vigués) como el empeño en presentarlo en directo, compaginando las fechas de la gira de Cena Recalentada con las actuaciones centradas en su exitoso trabajo de 2016, Casa.

Bajo la etiqueta Cena recalentada se presentó el pasado 6 de abril de 2019 en el Palau de la Música de Valencia con el setlist dedicado exclusivamente a Golpes Bajos ante un público rendido desde el primer momento.

Con una banda que cuenta con dos miembros originales de Golpes Bajos, Pablo Novoa (verdadero protagonista con el piano, guitarra y un par de solos de percusión y acompañante habitual de Ferreiro en estos últimos años) y Luis García al bajo, ambos situados de manera destacada en la composición escénica del concierto; y a los que hay que sumar Amaro Ferreiro y Martiño Villariño  -Marta Toro-; Iván Ferreiro fue desgranando las canciones del disco, alternando los tiempos medios donde se recreaba la atmósfera más íntima (Desconocido, Santos de Devocionario) con momentos de baile (Fiesta de los maniquíes) donde la gente se liberaba del encorsetado aforo de butacas para bailar en cualquier parte.

El excomponente de Los Piratas estuvo muy comunicativo explicando los diferentes temas y hablando del significado de la obra de Golpes Bajos (la rebeldía de la adolescencia en Cena Recalentada, las letras oscuras de Coppini, la tradición gallega, su visión personal de las canciones, los malos tratos en La Reclusa, etc.) o explicando todo su trabajo escénico con los diferentes sintetizadores que estuvo tocando durante el concierto (probando diferentes sonidos para que el público comprobara su funcionalidad).

Con un adecuado sonido que traslada al directo el concepto del disco, el concierto tuvo algunos momentos mágicos como la transformación del Palau en una especie de salón de baile con los reflejos de las luces de las bolas de cristal en ambos laterales del escenario durante Come Prima o la coda final electrónica en No mires a los ojos de la gente que se pudo oir en el tramo final del concierto.

Un trabajo y una presentación en directo, honesta, que lleva a terreno propio los temas de Golpes Bajos sin traicionar el original, con una puesta en escena impecable, cuidada, y que gusta tanto a los seguidores de Ferreiro como a aquellos que aman la música de los creadores de Malos tiempos para la lírica.

Escribe Luis Tormo